Hay sucesos inesperados que ocurren sin planificar. Esta es la mejor de todas las historias, un grupo de amigos, en un bote visitando la mística ola salvaje de Bastimentos: SILVERBACK.
Como es de costumbre la organización de este tipo de viajes, requiere coordinación, paciencia y conocer los pronósticos. Sabíamos que las olas iban a estar buenas y decidimos zarpar en compañía de Daniel Perez Arenas, Sam Ireland, Nini Marcadella, Brian Vitalo, Salomón Bittan y Salomón Chocron.
Al llegar, grandes ondas del Atlántico que terminan su recorrido explotando sobre una gran laja de piedra lisa, del tamaño de una cancha de football. Brian, Daniel y Sam, saltaron del bote y un grupo de surfers llegaron un poco más tarde para compartir la sesión. Los dos Salo y yo, decidimos quedarnos, ya que luego de Cosmic Wave este oleaje era totalmente diferente tanto en poder y tamaño, es por ello que aprovechamos para tomar buenas fotos desde el bote y disfrutar de la sesión.
Transcurrido el tiempo, las olas comenzaron a mejorar y el viento a soplar dándole la mejor forma.
Nuestros amigos bajaban las olas, acostumbrándose a esta sesión, sin embargo, jamás creeríamos lo que ocurriría a la mitad de la misma y se convertiría en uno de los incidentes virales más grandes de la historia.
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Este fue el momento mas loco de toda la sesión.
La felicidad de volver a Silverback, Daniel Perez.
Deslizandose hacia el slap, Sam Ireland.
Esto es Silverback
Sam, luego de la primera sesión.
Brian salta del bote y nada hacia la costa.